Los toros dan y quitan

EDUARDO LICEAGA MACIEL (1924 - 1946)

EDUARDO LICEAGA MACIEL

Matador de toros mexicano muerto en 1946 por el toro “Jaranero”, cárdeno, nº 93 de la vacada de Concepción de la Concha y Sierra, que lo corneó de extrema gravedad cuando le daba el pase del “molinete”, justo en la región perineal izquierda que lo atravesó por completo, en la plaza de San Roque (Cádiz) el 18 de agosto de 1946. Trasladado rápidamente al Hospital Militar de Algeciras, se produjo allí el fallecimiento del torero de 22 años aquella misma noche, regresando su cuerpo a México para su sepelio. Ese día de la tragedia alternaba con “El Vito” y Antonio Chávez Flores.

Eduardo tuvo un debut normal, pero ascendió rápidamente. Cada tarde lucía mejor y se hizo el amo en la temporada de 1944 en El Toreo, donde ganó “La Oreja de Plata”. Ese ritmo lo conservó en España, donde hacía temporada con una brillantez y solidez fuera de serie. Se convirtió en un puntero en España, con contratos signados en todas partes y con la máxima jerarquía. Vamos, ya había firmado la alternativa en la feria de San Miguel en septiembre en la Real Maestranza de Sevilla. Pocos pueden decir esto. Su designio era trágico, el 18 de agosto de 1946 en San Roque un novillo de Concha y Sierra cortó de cuajo las ilusiones. Murió a consecuencia de ese percance, en plena gloria, en pleno poderío. En ese trágico festejo Eduardo vistió de grana y oro. David Liceaga,  su hermano, maestro de toreros, preguntó el tono del color del vestido: “grana y oro” le informaron. ¿Cómo?, exclamó el maestro David, con una mueca de dolor. No es posible que se haya vestido de ese color. David tenía aversión por ese tono de terno. ¿Acaso será que el rojo es el color de la sangre?

Don Juan José Zaldívar Ortega refiere de su rodaje taurino lo siguiente: << nació en la capital de la república mejicana el 20 de noviembre de 1922. Sus hermanos, el matador de toros David y el banderillero Mauro no querían que Eduardo siguiera la carrera de ellos y le costearon estudios de bachillerato. Sin embargo, el infortunado muchacho decidió dedicarse al arriesgado arte taurino. Muy joven aún, al toro, de nombre “Cortesano” de Santín, le cortó las orejas y el rabo, así como el trofeo que había en disputa. En 1945 emigró a la Península y llegó aquí el 5 de abril acompañándole su madre y su hermano. Primeramente tuvo 14 actuaciones previas a su presentación en Madrid, el 26 de agosto de 1945, sus alternantes fueron Rafael Llorente y "Andaluz Chico", novillos de Garro y Díaz Guerra. Liceaga cortó una oreja. El 18 de agosto de 1946 fue a torear a San Roque (Cádiz), alternando con "Vito" y Chávez Flores un encierro de Concha y Sierra. En su primer enemigo de nombre “Jaranero”, cárdeno, número 93  de la vacada citada, al cambiarse la muleta por la espalda, el toro lo empitonó y arrojó al suelo. Volvió a atacarlo por la entrepierna, teniéndolo suspendido largo rato y solo entonces se pudo hacer el quite. La herida cerca del ano era muy profunda, lo trasladaron al Hospital Militar de Algeciras, falleciendo a las 10 de la noche. Eduardo Liceaga era un torero muy fácil y decidido en todas las suertes. En España llevaba muy buena campaña y lo que más deseaba era que Carlos Arruza le otorgara la alternativa a fines de ese año. "

La crónica del erudito Juan José de Bonifaz Ybarra, en su libro “Víctimas de la Fiesta”,  refiere que << mexicano del Distrito Federal, de estirpe taurina, llego a ser EDUARDO LICÉAGA MACIAL (debiendo ser un error de imprenta porque su verdadero apellido era Maciel) una primera figura de la novillería de su tiempo. Antes de doctorarse en España al término de la temporada de 1946, toma parte en la corrida que el 18 de agosto de 1946 se celebra en San Roque (Cádiz), en la que se lidia un encierro del hierro de Concha y Sierra. La res que abre plaza, el cárdeno “Jaranero”, hiere profundamente en la región perineal al diestro azteca durante la faena de muleta. Se le practica una cura de urgencia en la enfermería de la plaza y es trasladado finalmente al Hospital Militar de Algeciras, donde expira a las diez de aquella misma noche. Su cadáver fue enviado, por vía marítima, a su México natal. "

"Don Víctor", el acreditado historiador y propietario del blog taurino: "A los Toros", relata en sus efemérides, que un 18 de agosto de 1946, actuando en la Plaza de Toros de San Roque (Cádiz), fué cogido mortalmente el mejicano Eduardo Liceaga cuando toreaba de muleta al primer novillo, "Jaranero", de Concha y Sierra; herida gravísima en la región glútea muy cercana al orificio anal. Con el fin de operarle en condiciones más óptimas que en la enfermería de la plaza lo trasladaron al Hospital Militar de dicha localidad, la gran pérdida de sangre que sufrió fué la causante de su fallecimiento a las diez y media de esa noche. Le acompañaban en el cartel Julio Pérez Herrera "Vito" y Antonio Chaves Flores.

Nació en Méjico el 20 de noviembre de 1922. En 1939 actuó en Tampico como sobresaliente de Juanita Cruz, al resultar cogida se encargó de matar los dos toros anunciados. Se presentó en "El Toreo" el 6 de agosto de 1944 estoqueando novillos de Rancho Grande en compañía de Nacho Pérez y Tacho Campos. Toreó por primera vez en Madrid -cortó una oreja- el 26 de agosto de 1945 junto a Rafael Llorente y Andaluz Chico, novillos de Garro y Díaz Guerra.


Eduardo Licega
Cortesía de
http://alostoros.blogspot.mx/