Los toros dan y quitan

AUGUSTO MARADAS (XXXX - 1860)

AUGUSTO MARADAS

Solo para efectos ilustrativos

“Rejoneador”  (Óleo sobre tela)

Obra de la pintora Mexicana María Angélica González-Dávila

Refieren crónicas de esas fechas, que fue un rejoneador cogido por toro el 22 de septiembre de 1860 y que fue difunto  el mismo día a resultas del incidente.

El ilustre historiador hispano, don Juan José de Bonifaz Ybarra, refiere de este rejoneador portugués, solamente," que el luctuoso suceso acaeció en la localidad lusa de Nazaré, en septiembre de 1860. "

El erudito taurino Juan José Zaldívar Ortega, en su libro "Víctimas del Toreo", Apartado de Picadores, página 47, refiere de este personaje que: Augusto Maradas, rejoneador portugués, muerto a unos meses de comenzar su profesión. Era cuñado del banderillero Caixinha, y fue cabo de artillería. Animado por sus camaradas militares, que admiraban sus dotes de jinete, se dedicó al toreo a caballo. Cuando llevaba apenas seis meses en la profesión, en septiembre de 1860, fue a torear a la Plaza de Toros de Nazareth (Portugal). Un testigo presencial de la corrida, Diamantino Pontes, narró así la muerte del desgraciado Maradas: «Mi pobre compañero entró en el ruedo a picar al primer toro; se veía blanco como la cal. Todo él temblaba; inspiraba dolor. Citó para la suerte de gaiola a un tremendo bicho de la ganadería de don Francisco Bate-Folha. Me di cuenta de que el infeliz mozo estaba fuera de su terreno, y presentí la cogida cierta. Así fue: arrancó el animal con rapidez, derribando a tierra caballo y caballero, que golpeó fuertemente en la cabeza el arzón de la silla, abriéndose una gran brecha en el cráneo, que le causó la muerte en pocos momentos.»